08 de Abril del 2016
Los profesores universitarios que dedican tiempo a la investigación enseñan mejor
- Según un estudio, los docentes que investigan imparten de media un 21,5% más de clases que los que no lo hacen.
- Pero la investigación se puede volver un problema cuando es excesiva, ya que consume la mayor parte del tiempo y energía del docente.
Un estudio realizado por la Universidad Jaume I (UJI) y la Universidad Complutense (UCM) concluye que los profesores universitarios que investigan enseñan mejor. En él se afirma que los docentes presentan un mejor criterio para la elección de los temas de su enseñanza y son más rigurosos por los controles constantes en su actividad científica.
En este análisis, publicado en Applied Economics, han participado 604 profesores de 25 departamentos. Entre sus conclusiones destaca que los docentes que investigan imparten de media un 21,5% más clases que los que no lo hacen y que dos tercios de ellos podrían mejorar su enseñanza si realizaran más investigación.
Para llevar a cabo el análisis se han tenido en cuenta 69 variables. Para medir los índices de enseñanza, tareas administrativas e investigación de los docentes se incluía el Teachqual, con el que los estudiantes evaluaban la calidad de la enseñanza en una escala del 0 al 9, y el Researchl, que mide la calidad de la investigación. Así, los autores del estudio han descubierto que los docentes que cuentan con resultados de investigación enseñan mejor que otros profesores con menor actividad en este campo, según destaca Teodosio Pérez Amaral, del departamento de Economía Cuantitativa de la UCM.
Entre las razones que pueden explicar estos resultados, los autores sugieren que los investigadores presentan mejor criterio a la hora de elegir los temas que abordan en la docencia y tienen un mayor acierto y rigor por los continuos filtros y controles a los que está sujeta su actividad científica, como explica Nikolaos Georgantzis, del Laboratorio de Economía Experimental de la UJI y coautor del trabajo.
Pero la investigación también se puede volver un problema cuando es excesiva, ya que consume la mayor parte del tiempo y energía del docente. Las tareas administrativas también restan tiempo al docente, afectando a la excelencia educativa si el profesor no recibe a cambio una disminución de la carga docente.
Por áreas, los profesores del departamento de Educación consiguieron los mejores resultados, y entre sexos fueron las mujeres las que registraron una docencia de más calidad. Elaborar libros y material multimedia también benefició a la enseñanza, pero no lo hicieron los cursos de mejora pedagógica en los que participaron los profesores.
Los autores proponen que el organismo evaluador del profesorado, la ANECA, incentive la calidad docente igual que hace con la investigación, algo que proponen controlar con encuestas o con auditorías con profesores externos.